La pesca de costa en el Riopla,
en la costanera porteña, sigue tenienedo esos
vaivenes irregulares producto del tiempo aún inestable
por Emilio Pieñeiro
para Area de Pesca
Las obligaciones y quehaceres familiares nos ofrecieron apenas un hueco en la tarde sabatina de esta inestable primavera citadina, y decidí aprovecharlo despuntando el vicio con amigos durante media jornada en la porteña Costanera Norte.
Sabido es que desde hace un tiempo, y tal vez producto de la inestabilidad climática que presenta un día primaveral seguido de varios de una mezcla inentendible de invierno-verano-primavera-invierno en la misma jornada, y de la suciedad que está llegando a causa del arrastre de las inundaciones pasadas en el litoral, la época de transición entre las diferentes temporadas se extiende, el río no llega a asentarse, y los resultados de pesca son pobres en concordancia con tal situación.
A pesar de ello, y para no desaprovechar la oportunidad, me acerqué hasta la costanera de Bs. As. en busca de amigos con quienes compartir un grato momento entre plomos y anzuelos.
El lugar elegido fue la plazoleta ubicada frente al estacionamiento del aeroparque de la ciudad, y como para no ser una excepción a la inestabilidad climática mencionada, la jornada transcurrió entre ratos con cielo limpio, sol a pleno y aguas tranquilas, y momentos de grandes nubarrones grises, con un viento de intesidad cambiante que alteraba el estado del río.
En este sector se hicieron presentes las Damas del Río, las Bogas, que picaban una tras otra en tamaños que iban de pequeño a mediano, apareciendo algunas que llegaron a los 2 kilos de peso.
El pique no estaba fácil, ya que jugaban mucho con la carnada, (la vedette fue el salamín), y muchas veces solo picoteaban sin llevar, por lo que se daban muchos piques errados. Pero cuando se decidían a comer se producía la linda batalla, y se podía alzar una presa que sorprendía por los tamaños dispares.
Entre tantas damiselas, no podían faltar los omnipresentes bagres blancos y amarillos, aunque aparecieron en menor cantidad pero con mejores medidas, y tampoco algunas carpas interesantes que nunca faltan a la cita.
Asimismo es de destacar la diversidad de resultados en los diferentes sectores de la zona. Mientras en la punta norte los pescadores se quejaban porque "no sale nada", en el Puerto de Olivos se capturó algún Doradillo, y en El Abanico y la Plazoleta se obtuvieron las capturas mencionadas.
Esperemos que el tiempo se establezca y asiente finalmente, como para poder gozar de jornadas de pesca sabiendo que se puede esperar, acorde con la época del año.
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GANARON LAS BOGAS!!
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