Adrenalina en el agua, por Crónica Pesca

En Goya, tuvo lugar la 40ª edición de la Fiesta Nacional del Surubí,

que superó todo lo esperado. Enteráte de todos los detalles

en esta nota de Horacio Pascuariello para Crónica Pesca

Es difícil describir de qué manera logró arraigarse en la idiosincrasia del pescador deportivo este ritual que es la Fiesta Nacional del Surubí, la cual para esta edición aniversario reunió 924 embarcaciones y a más de 2.750 aficionados, que llegaron desde distintos puntos del país con la expectativa puesta en el encuentro que se vivió desde días previos al certamen.

La convocatoria fue tan importante que contó con la presencia de personalidades de todas las ramas del deporte, como el arquero mundialista Ubaldo Matildo Filliol y el piloto Marcos Di Palma, quien estuvo acompañando al candidato a presidente de la nación Daniel Scioli que como motonauta se dio el gusto de participar de la largada.

Después de dos estrelladas y tibias noches previas donde el clima permitió disfrutar de la música al aire libre a más de 8.000 personas en el predio Costa Surubí, la mañana del sábado parecía no querer participar de la fiesta y de a poco fue tapando el cielo con unas cargadas nubes grises que solo respetaron la largada y se reservaron lo peor para la madrugada.

Casi a las 15.00, como si fuera un gran ballet ensayado, el estrecho riacho Goya quedó cubierto de lanchas, mientras que en el cielo una escuadrilla de aviones acrobáticos puso una cuota adicional de adrenalina, acompañando a los pescadores con pasadas a pocos metros de sus cabezas e inclusive sumando un gesto de audacia cuando tocaban el agua con sus alas. Después de casi 40 minutos de un espectáculo sin igual, el puerto de Goya quedó nuevamente en silencio, pero no el río, que a partir de las 17.00 comenzó a sacudirse sumando una dificultad más a los pescadores y sus embarcaciones, de las cuales muchas fueron averiadas e inclusive hundidas y otras recién pudieron volver a puerto remolcadas el domingo por la tarde.

Intensas ráfagas de viento, lluvia y granizo fueron el desafío a superar por los equipos hasta casi el amanecer. Allí estuvieron presentes la camaradería, la solidaridad y la experiencia, ya que los pescadores se prestaban ayuda entre sí e inclusive algunos rescates fueron protagonizados por ellos mismos, lo cual dio por resultado que no se viviera ninguna situación de riesgo más que la que hubo que enfrentar con el enojo del río.

A pesar de esto, el surubí estuvo presente, fiscalizándose 189 capturas, todas devueltas a su medio, destacándose algunas zonas donde el pique fue muy bueno, como por ejemplo la que le tocó al equipo 58 de la barra pesquera Santa Rita, que logró cinco piezas seguido por la Peña Chaqué La Espina, que se alzó con cuatro, y en tercer lugar la barra pesquera Surubí Matero que obtuvo también cuatro piezas. En la categoría pieza mayor, los santafecinos se quedaron con el podio completo. Primero fue la peña "Yo lo Vi", con un surubí de 119 centímetros, seguidos por Atlético y Tiro con una captura de 108 centímetros y Las 3 K con una de 106 centímetros.

Dejamos para un capítulo aparte la espectacular cena y entrega de premios, donde la prolija organización a cargo de la Comupe, encabezada por Pedro Sa, logró “enchamigar” a más de 6.000 personas cerrando uno de los eventos de pesca deportiva más importantes del mundo. Agradecemos a Héctor Dovis y Adrián Ayala, a cargo de Prensa, por la invitación.

por Horacio Pascuariello

para Crónica Pesca

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