Río Salado: Próximo y con buen pique, por Crónica Pesca

Horacio Pascuariello visitó el Río Salado,

y nos cuenta los resultados de la Pesca realizada

en esta nota del Suple Pesca de Diario Crónica

En Buenos Aires, el río Salado entretiene por su variedad de especies.

Con sus 640 kilómetros de longitud, el río Salado es el curso de agua más importante que atraviesa la provincia de Buenos Aires y marca a su paso diversas zonas que tienen a la pesca deportiva como principal actividad. 

Uno de estos puntos es el pesquero Don Eduardo, el cual está muy próximo a la ciudad de Buenos Aires, más exactamente en el kilómetro 166 de la autovía 2, lugar hasta donde nos acercamos para comprobar cómo estaba el pique de las diversas especies que contiene.

Es importante señalar que el ingreso es por un camino de tierra que se abre metros antes del puente carretero, sobre la mano derecha sentido a la costa atlántica, y no tiene ningún tipo de señalización. 

Hay baños y servicios básicos por un costo muy económico, pero de todas maneras es importante llevar todo lo necesario para pasar un día al aire libre, teniendo en cuenta primordialmente que no hay sombra, ya que son campos con muy pocas arboledas y un golpe de calor nos puede llevar a abortar la salida.

Es vital para el éxito de la jornada tener a mano distintas carnadas e ir probándolas a diferentes profundidades, variando las recetas, para esto les recomendamos hacer la parada en el kilómetro 71 donde El Biguá atiende desde las cinco de la mañana. 

En nuestro caso la que más rindió fue la masa a fondo; a flote funcionó muy bien la clásica lombriz, la carnada blanca y las mojarras. 

Utilizamos líneas de tres boyas chicas, tanto anclada con mandale como en movimiento, dejándolas derivar, pero no pudimos dar con las lisas aunque saltaban continuamente; sí obtuvimos un lindo pejerrey antes de que comenzara a picar el calor del mediodía y también un bagre sapo que subió a la superficie atacando la mojarra. 

El paternóster tuvo mucho trabajo y en el último anzuelo picaban permanentemente carpas de todos los portes; mientras que en los dos primeros, dientudos y pequeños patíes. 

Esta modalidad resultó ser muy entretenida y se podía hacer lanzando el aparejo a corta distancia, es recomendable que la línea sea de por los menos tres metros con una boya palito grande pero liviana terminada con una plomada de 25 gramos. 

De fondo salieron muchas carpas con masa, también patíes, bagres y unos simpáticos y coloridos cangrejos que con su voracidad hacían cabecear las cañas.

El río está en condiciones óptimas con un pique que se detenía de a ratos y nos obligaba a estar atentos de forma permanente, por lo cual es una buena opción para quien busque una pesca cercana y económica. 

Informes: www.pesquerodoneduardo.com.ar.

por Horacio Pascuariello

para Crónica Pesca

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