Río de la Plata: La pesca del Peje no falla

Te traemos el relato de un relevamiento en el Riopla,

en el que se obtuvieron buenos resultados

 
Sabíamos que la temporada del pejerrey se había iniciado temprano y a pleno en la zona del Río de la Plata correspondiente a nuestra región por lo que decidimos con mi padre, José “Cacho· Grima y los amigos Nicolás Pellegrini y Santiago Navarro hacer una salida embarcada a unos setecientos metros de la costa.

Era domingo y salimos a las 9 por el arroyo Doña Flora. Mientras navegábamos hacia la zona en donde haríamos la pesca anclados, fuimos armando los equipos con cañas telescópicas de cuatros metros de longitud; líneas de multifilamento con tres boyas tipo chupetonas medianas y anzuelos Nº 2.

Para usar como carnadas habíamos llevado mojarras vivas de medianas a grandes y también saladas, que finalmente fueron las que mejores resultados nos aportaron.

Antes de lanzar las líneas al agua armamos, con aceite de pescado, una buena calle de ceba, ya que consideramos que es algo más que importante en el Río de la Plata y que a la hora de contar los resultados de la salida, define la cuestión.

Cuando comenzamos a pescar los piques se daban en forma esporádica y tan sutilmente que había que estar revisando la carnada en forma periódica.

Hubo pocas capturas y de pejerreyes de portes realmente chicos, los que fueron devueltos al agua con el menor daño posible.

Dudábamos ya al mediodía entre volver o seguir y probar suerte a la tarde para ver si cambiaban las condiciones.

Nos quedamos y tuvimos nuestro merecido premio, porque a partir de las 15 se empezaron a dar piques francos, uno tras otro.

Los portes mejoraron notoriamente y hasta hacíamos algunos dobletes.
El ejemplar más grande pesó 800 gramos, pero lo notorio era la voracidad de los pejerreyes, lo que quedó demostrado con un ejemplar que llegó a tragarse dos anzuelos en la misma clavada.

Relevamiento: Jonatan Grima

 
Fuente: El Día de La Plata


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