Adela: Una laguna cercana y con una pesca más que interesante

En la Laguna Adela se cubre la cuota

de Pejerreyes sin inconvenientes

resultando una pesca entretenida

 
Siguiendo el corredor de la Autovía 2, encontramos unas cuantas opciones para ir en busca de los flechas de plata, algunas de costa y otras embarcado.

En esta ocasión fui acompañado por Fernando del Intento a la laguna Adela, un lugar donde podemos pescar de costa y embarcado.

Partimos de La Plata con muchísima niebla; con mucha atención realizamos la primera parada en el km 71 Carnadas El Biguá donde cargamos unas mojarras medianas, continuamos por Autovía 2 y al llegar al km 134 y medio, luego de pasar la escuela, nos encontramos sobre mano derecha, una tranquera, donde ingresamos a un campo privado, que luego de abonar una entrada, y siguiendo un camino dentro del campo, complicado si llueve (llamar antes de ir).

Nos dirigimos a la laguna Adela, un lugar con muchas barrancas y un frente de más de 3 kilómetros para realizar la pesca de costa, y una bajada para botar embarcaciones; este pesquero por ahora no posee botes en alquiler, pero en nuestro caso llevamos uno de aluminio, equipado con un motor de 15 Hp.

Luego de cargar todos los equipos partimos ayudados por un GPS, ya que la niebla persistía y la visibilidad era muy poca; fuimos buscando la zona de confluencia con el arroyo “Girado”; al llegar comenzamos a preparar los equipos, con cañas de 4 metros, reeles frontales cargados con nylon 026 en mi caso y multifilamento en el reel de Fernando, las líneas de tres boyas, donde la idea era probar una boya nueva de Súper Flot, con caño de plástico, las brazoladas de 20 a 40 cm de largo, anzuelos 277 F Nº 2 y las carnadas mojarra viva, salada, filet de dientudo y de pejerrey.

Al arrojar las líneas al agua, éstas se quedaban al lado del bote ya que el viento era casi nulo, pero en la línea de Fernando se vieron los primeros piques, con ejemplares que iban de 25 a 32 cm.

Al cortarse el pique decidimos cambiar de zona, y mientras navegábamos se veían muchos bulos de pejerrey, pero al no tener viento, éstos no picaban.

La línea F600 fue la que mejor resultado dio, ya que la podíamos alejar del bote.

Promediando las dos de la tarde, se levantó un suave viento, que disipó la niebla, el agua se oxigenó un poco más y de esta manera los portes mejoraron, y comenzamos a tener mucha más actividad en superficie, fue así que uno a uno llegamos a cubrir la cuota de la laguna que es de 25 piezas por pescador. Al promediar la tarde decidimos regresar a la costa, contentos por la pesca realizada y el día entre amigos que pasamos.

Relevamiento: Daniel Pavoni




Fuente: El Día de La Plata



Lea otros Relevamientos haciendo click aquí