Las Tarariras prometen una temporada a pleno en la región

Luego de varios años de ausencia no deseada,

la Tararira vuelve a reinar en espejos bonaerenses.

Si las cuidamos, esta vez podremos divertirnos

por mucho tiempo con su deportiva pesca

Luego de estar varios años con una pesca muy pobre de tarariras en los distintos ámbitos de pesca, como lagunas, arroyos y ríos, las famosas taruchas ((hoplias malabaricus), volvieron a todos nuestros ámbitos con muy buena población y con tamaños excelentes.

Hoy muchos pescadores se dedican a pescar esta especie que reina nuevamente en lagunas y ríos, es una pesca muy interesante y que da muchas satisfacciones a la hora de obtener una pieza.

Una especie que logró recuperarse después de varios años casi desaparecida.

Territorial y muy agresiva ofrece grandes peleas. La tararira es el pez depredador de los bajos. 

Su cuerpo cilíndrico y sus aletas están adaptados para moverse en lugares de poca profundidad y deslizarse entre las plantas acuáticas con facilidad.

Las únicas pequeñas migraciones que realizan se producen por la falta de agua. 

Estas características (especialmente en ambientes cerrados) hacen que el lugar de una tararira extraída tarde bastante tiempo en volver a ser ocupado por otra. 

Así es como vemos zanjas, lagunas y otros lugares “vaciados” tanto por la pesca comercial como por la deportiva.

Además, por ser peces depredadores, las tarariras no se encuentran en las mismas cantidades que otras especies que están por debajo en la cadena trófica.

Es posible pescarla en diferentes modalidades, ya sea spninning, bait o fly cast. En esta oportunidad logramos capturas en las tres modalidades. 

Con señuelos blandos como ranitas o gusanos de silicona tipo Z-Man, con señuelos rígidos de media agua como el Storm SubWart y en el caso de las moscas utilizamos Popper y streamers.

Estuvimos recorriendo varios ámbitos, donde practicamos la pesca en diferentes modalidades, las cuales requieren equipos distintos para poder realizarla. 

Pescar con el equipo adecuado, siempre liviano, pero lo suficientemente potente como para poder “arrancar” las capturas de entre la vegetación cuando la situación lo requiera. Darle vida al artificial. 

Sé que este concepto es un tanto complicado para expresar, pero es fundamental ir un poco más allá del “lanzar y recoger”, es transmitir al artificio algo más con la capacidad de interesar a los peces.

No apurarse con la clavada cuando se pesca con artificiales blandos. Es un “plus” que le permitirá transformar piques en capturas. 

En modalidad Spinning Cañas Tech Tomahowk de 6,6 pies 10/17 lb. de potencia, microreel Mitchell cargado con multifilamento, y leaders de 20 libras. 

Para la pesca de Bait Casting utilizamos cañas de 2,4 a 2,7 mts y de 10/17 lb. de potencia, reel cargado con multifilamento, y leaders de 20 libras. Y para la pesca de Mosca Caña Saint Croix Reign Nº 7 – Rerl Grey Gull serie A. Línea Bass Taper Cientific Anglers.

Luego de una reseña de que equipos utilizar y en que ámbitos se mueve este pez, les cuento que fuimos a probar suerte al arroyo Juan Blanco, en la zona de Magdalena, donde obtuvimos varios ejemplares de tarariras medianas y chicas, las cuales fueron devueltas a su hábitat, para preservar la pesca del mañana, de nuestros hijos y nietos.

Hoy en todas nuestras laguna podemos pescar tarariras, ya que están muy bien pobladas, sólo queda hacerse un lugar en la semana y disfrutar de esta magnifica pesca que atrapa a todo pescador y conservemos los lugares de pesca sin dejar residuos, sin romper y siempre respetando los reglamentos de pesca.

Relevamiento: Marcos Giaon

Fuente: El Día de La Plata

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