Testeamos diferentes escenarios desde la costa
del Río de la Plata, en distintos momentos,
con distintas técnicas y siempre hubo resultados nulos
La falta de regularidad climática se hace sentir en el agua.
Ayer sábado probamos la pesca desde la costa en distintos momentos y lugares, y no obtuvimos resultados.
Por la mañana
Nos acercamos con mi amigo Ivan Penjasoff a la zona de la Usina, y nos desplazamos unos metros hacia las izquierda, buscando un mejor lugar para probar algunos señuelos, usando equipos de spinning y baitcasting.
El fuerte viento N-NE más la parada de agua que al rato de llegar comenzó a transformarse en una pronunciada bajante jugaron en contra.
Tuvimos varios toques, algún doradillo que tomo el lure pero no adecuadamente por lo que logró soltarse rápidamente, y no más que eso.
El agua aún no logró alcanzar la temperatura ideal y acorde para esta época, por lo cual los resultados desde la costa son muy inferiores a los que se obtienen en una salida embarcada en el Río de la Plata.
Será cuestión de seguir esperando hasta que se logre la regularidad en los días templados, para que podamos pinchar distintos especímenes.
Por la noche
La noche de ayer sábado era muy calurosa y sofocante en la ciudad de Buenos Aires.
Eso disparó nuestra tolerancia, y decidimos acercarnos en familia hasta la costanera porteña, buscando refrescarnos y aprovechar para despuntar el vicio.
La costanera se encontraba superpoblada de gente que paseaba, asi como de pescadores agitando sus aparejos.
Los que llegaron durante la tarde acusaron algunos patíes y mimosos (que no pudimos comprobar), pero para la noche la situación era otra.
Se mantenía el viento matutino, con ráfagas fuertes que pre-anunciaban la tormenta pronosticada para este domingo, y el río se encontraba bastante crecido.
Intentamos de todo, usando distintos tipos de carnadas y líneas, buscando tentar distintas especies, pero casi ninguno de los pescadores de la zona obtuvieron resultados.
Alguno sacó un bagrecito blanco, otro obtuvo un patí muy pequeño, pero esas capturas no fueron representativas en lo abosluto en cuanto a los resultados en general.
Hablando con otros pescadores, nos plantearon lo mismo que venimos sosteniendo.
Hace mucho tiempo que esta inestabilidad del clima se traslada al agua, que nunca llega a asentarse, y asi no se pueden lograr buenas capturas.
Viendo que aunque nos quedáramos toda la noche no iba a cambiar el resultado, decidimos cerrar las cañas y emprender el regreso a casa.
por Emilio Piñeiro
para Area de Pesca
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