La Laguna Las Perdices esta poblada de
Pejerreyes de portes medianos a grandes,
y los mejores piques se dan a partir del medio día
Con la llegada de las primeras refrescadas, es inevitable empezar a mirar las lagunas de nuestra provincia con mucho cariño, ya que las salidas en busca del pejerrey están en la puerta de una nueva temporada; por eso me comuniqué con Juan Cruz Coccaro, actualmente haciendo guiadas de pesca en laguna Las Perdices, con la idea de realizar un relevamiento.
Acordado el día, partí de la ciudad de La Plata, acompañado por Alberto Staffa, viajando por avenida 44, hasta tomar ruta 215, luego de pasar Brandsen, seguimos hasta Monte, giramos a la derecha por ruta 41, para retomar en ruta 3, al llegar al km 116 nos encontramos con el camping San Huberto, el cual posee una linda arboleda, sanitarios, bajada de lanchas, alquiler de botes y servicio de guía.
Al llegar nos estaban esperando Coco y su amigo Cristian García, quien nos acompañaría a realizar la nota.
Una vez que cargamos todos los elementos en el tracker de 6,40 metros, equipado con un motor de 40 hp, salimos en busca de los flechas de plata.
La primera zona en anclar, fue sobre la margen izquierda y entre los juncos, con la idea de buscarlos a ras de fondo, utilizando boyas yoyo de 18 mm y palitos de igual medida; la carnada fue mojarra viva, provista por Carnadas El Grillo, ubicada en la ruta 205, km108.
Una vez que armamos todos los equipos, lanzamos nuestras líneas al agua, siendo de inmediato los piques, tanto de pejerrey como de dientudo, al cual utilizamos de carnada pintando de amarillo; los pejerreyes medían de 25 a 30 cm, gordos y muy peleadores, también hay muchos fuera de medida que hay que devolver al agua.
Luego de un par de horas y viendo que el viento era cada vez más intenso, decidimos hacer una gareteada, pero esta modalidad no fue satisfactoria, por lo que decidimos pescar anclados y viento abajo, siendo de esta manera que capturamos los mejores portes a tan solo 25 cm de profundidad.
Hay que decir que la mejor hora de pesca se dio después del mediodía, como lo había anunciado el guía, pero al llegar las tres de la tarde, el dientudo se activó y prácticamente no dejó comer más al pejerrey, cambiando un par de veces de lugar, pero siempre con las mismas respuestas.
A modo de consejo, tratar de evitar las boyas de color rojo y encarnar muy prolijo, ya que el pejerrey es de boca muy chica y al tener mucho plancton la laguna, el pez toma y larga la carnada, teniendo que esperar el momento justo para la clavada.
Relevamiento: Daniel Pavoni.
Servicios: guía de pesca,
Tel. (02226) 15-685549.
Fuente. El Día de La Plata
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